De la Boca Solo Salen Dos Clases de Frutos

El Padre me despertó el pasado viernes para entregarme estas palabras.

Solo hay dos frutos (resultados) que produce la boca. Fruto de Vida o fruto de muerte, no hay término medio.

La palabra que no da fruto es una palabra ociosa y muerta. Por eso las Escrituras hablan de que el que aprende a dominar su lengua y sabe hacer silencio es sabio, porque el que domina la lengua domina todo el cuerpo (la carne, las emociones). Es un hijo de Dios sazonado, probado y perfeccionado. Una persona que mide lo que habla y con sabiduría elige sus palabras para no perder el tiempo y no pecar ni contra Dios, ni contra si mismo u otra persona.

“Comerás del fruto de tu boca.

En la boca está el poder de la vida y la muerte”.

¿Que estás comiendo en este tiempo? ¿Cuál es el producto o la consecuencia (ya sea buena o mala) que estás enfrentando en el momento presente? Observa y examina las palabras que han salido de tu boca en años y tiempos anteriores y analiza el fruto que estás comiendo en el presente. Esto podría llevarte a un momento de iluminación personal para darte cuenta del poder y el profundo impacto que tiene este tema que estamos hablando.

“Hijos míos, acérquense y escúchenme; voy a enseñarles a honrar al Señor. ¿Quién de ustedes anhela vivir mucho tiempo? ¿Quién quiere vivir y llegar a ver el bien? Eviten entonces que su lengua hable mal; eviten que sus labios profieran mentiras. Apártense del mal y practiquen el bien; busquen la paz, y no la abandonen.”

Salmos 34:11-14 RVC

Hay alguien que va a caer en cuenta con esta palabra hoy.

Declaro que la claridad del Espíritu del Señor caiga sobre ti trayendo luz y vida a tus ojos y corazón para que avances hacia la libertad en la carrera que tienes por delante y llegues al final habiendo arrebatado todo lo que te pertenece conforme a la herencia que fue conquistada por nuestro Señor.

Dios te bendiga.

Jireh Gerch